Mendoza, reconocida como la cuna del vino donde se establecieron los primeros productores argentinos, ofrece algunos de los mejores vinos del mundo. Cada año, miles de turistas llegan con un único propósito: degustar esta magnífica bebida.
Si queres sumarte a ellos, a continuación vas a encontrar los tips necesarios para organizar tu propia ruta del vino en Mendoza.
Pero, ¿cómo puedo armar mi propio circuito para recorrer la ruta del vino en Mendoza? Acá te dejamos algunas recomendaciones que te van ayudar a planificar tu viaje.
¿Cómo debo organizarme?
Antes de empezar a planificar tu viaje, es importante que conozcas las principales regiones vitivinícolas de Mendoza:
- Luján de Cuyo: Es considerada la cuna del Malbec, cuenta con bodegas centenarias y modernas, todas ellas rodeadas por imponentes paisajes de montañas.
- Valle de Uco: Esta región, está ubicada al pie de la Cordillera de los Andes y es famosa por sus vinos de alta gama y su innovación en técnicas de producción.
- Maipú: Es una de las regiones más tradicionales, con bodegas familiares que han sido parte de la historia vinícola de Mendoza.
Una vez que hayas decidido qué regiones queres visitar, podes comenzar a organizar tu itinerario.
Recomendaciones para recorrer la ruta del vino
Para recorrer la ruta del vino en Mendoza, tenes varias opciones:
- En bicicleta: Esta alternativa permite a los visitantes disfrutar del paisaje y el aire libre mientras se desplazan de una bodega a otra. Es una opción ecológica y saludable, pero requiere de buena condición física.
- Alquilando un auto: Esta opción te ofrece la libertad de moverte a tu propio ritmo y seguir tu itinerario personalizado. Sin embargo, es importante que designes a un conductor sobrio si planeas degustar vinos.
- Empresa de turismo: Empresas como Lauke Tours ofrecen tours guiados por las bodegas, lo que puede ser ideal si prefieres dejar la logística en manos de expertos.
- Por aplicaciones de transporte privado: Plataformas como Uber o Cabify te permiten manejar al 100% tus tiempos para estar lo más relajado posible.
- En colectivo o remis: Los colectivos locales pueden llevarte a las bodegas más cercanas a Mendoza capital, mientras que los remises son una opción para llegar a bodegas más alejadas.
- Por aplicaciones de alojamiento: Plataformas como Airbnb Experiences ofrecen tours de vino que podes reservar directamente desde tu teléfono.
¿En qué época es conveniente hacer la ruta del vino?
Mendoza es hermosa en cualquier época del año, pero la primavera y el otoño son las mejores estaciones para visitar las bodegas. Durante estos meses, las temperaturas son más agradables y los paisajes se llenan de colores vibrantes.
Otras consideraciones
Además de las bodegas, Mendoza ofrece una gran variedad de atracciones turísticas:
- Visita al museo del vino ubicado en la Bodega La Rural, este museo ofrece una visión histórica de la industria vinícola de Mendoza.
- Actividades al aire libre como paseos en bicicleta y cabalgatas entre viñedos.
- Conocer las cocinas de Mendoza, las cuales son famosas por su carne a la parrilla y empanadas, que se maridan perfectamente con los vinos locales, restaurantes como 1884 de Francis Mallmann son reconocidos por su alta cocina.
No te pierdas la oportunidad de combinar tu visita a las bodegas con excursiones al aire libre y disfrutar de la exquisita gastronomía local.
La ruta del vino en Mendoza es una experiencia inolvidable que podes personalizar según tus intereses y preferencias. Con una buena organización y teniendo en cuenta todas nuestras recomendaciones vas a poder disfrutar al máximo de tu visita a esta región vinícola de Argentina.
¿Por qué elegir contratar una excursión de vinos por las bodegas?
Los tours contratados son ideales para aquellas personas que no tienen transporte propio, o que quieren conocer varias bodegas en un día.
Además, es importante advertir que quienes deseen visitar alguna bodega por cuenta propia deben solicitar un turno con anterioridad. Estos cupos habitualmente se agotan rápido.
Sin embargo, al contratar los tours con Lauke Tour podemos ahorrarnos el tedioso trabajo de intentar realizar una reserva, o en el peor caso, llegar tarde a nuestro turno y no poder realizar la visita.
